Bajo cero
El poncho no cubre a todos
De un sistema social que determina que los ciudadanos con menos recursos se mueran en la calle de frio no se puede afirmar que es un buen sistema, lo menos que se puede decir es que practica una negligencia criminal; es decir no cubre las circunstancias previsibles y evitables que caen bajo su responsabilidad.
Para empezar cualquier gobierno debe asegurar un mínimo de garantías para que la sobrevivencia de todos sea posible. Para eso está… ¿no es verdad?
Que luego aparezca algún representante ministerial diciendo que 6 personas en lo que va del invierno murieron por culpa de exposición a las bajas temperaturas y no de pobreza es indignante.
Sería aceptable la explicación si le pedimos el certificado de defunción a la medicina forense… pero en el caso de representantes políticos resulta ser una burla sádica; es lo mismo que decir que alguien asesinado murió exclusivamente a causa de los proyectiles o de las puñaladas… esa es solo la causa inmediata pero los revólveres no disparan solos ni los cuchillos dan puñaladas de muerte si nadie los empuña. Nadie podría discutir ni evadir la evidencia de que las heladas son solo circunstancias pero la causa de los asesinatos es la pobreza extrema…
La pobreza extrema es la asesina. Es la que empuña el arma y elige a sus víctimas.
Estos orientales no murieron congelados por espíritu aventurero en una expedición a la Antártida en el siglo 19. Murieron hoy, en el experimento frenteamplista que tanto autoriza la pobreza extrema como la riqueza extrema. Para ser franco, a mí entender, no solo las autoriza sino que las promueve.
Lo constatable es que a los ricos no los matan las heladas. Estos fallecidos de pobreza (como el bebé en Artigas) murieron porque el poncho que cubre a los ministros a temperaturas confortables no cubre a todos los habitantes del país. Igual que en todas las épocas, el poncho, ahora frenteamplista, no alcanza pa’ todos.
Hay ¿invertidos? 6500 millones de dólares en bonos del tesoro norte-americano financiando crímenes imperiales pero la guita no alcanza para darle techo a la gente. Se sigue la receta yanqui y fondomonetarista que aconseja que la economía no se toque… que los pobres duerman a la intemperie y que los ricos sigan acumulando billetes.
Cambiamos de poncho pero seguimos en las mismas. No ganamos nada si le cambiamos el color a esta prenda porque el problema es el tamaño. Y este tamaño es “extra sixe” pa’ los ricos y “extra small” pa’ los pobres.
La nota (el tema) da para mucho mas por sus implicaciones morales, de convivencia y de objetivos políticos–sociales de esta republica…pero la vamos a escribir “cortita como propina de machete”. Y sí, claro que ya sabemos que si Uruguay gana el sudamericano o México nos elimina nos vamos a olvidar rapidito de este tema… No deberíamos.
Como se deduce, esta tragedia de los “muertos bajo cero” me pone triste porque se lo que es el frio, el hambre y no tener techo en este país que desde que nací se hace auto-propaganda como “el país de las vacas gordas”
Y lo que quiero decir para finalizar, es que: Para prevenir y evitar estos crímenes, lamentablemente no podemos hacer como pedía Mario Benedetti y solicitar “la inmediata promulgación del verano”.
Por lo tanto lo único que nos queda y podemos hacer es tratarlos como a las catástrofes de aviación.
Entonces…si esto fuera similar a la investigación de un accidente aéreo no podríamos sacar la conclusión de que el Frente Amplio es un avión seguro porque solo mata dos o tres pasajeros por semana y que 400 o 500 se salvan… no podríamos sacar esa conclusión, no señor; diríamos que es un avión de mierda que en todo caso solo sirve como chatarra.
jaime g
